PLANET MÓNGOGO
Sin lugar a dudas destinado a gente jóven (y aquí que cada uno entienda lo que quiera) este "restaurante" merece una mención especial en el elenco (joder, como va esto) leonés.
Con un aire negruzco y la película de "Freaks" por bandera (y por mantelería) este sitio es el "antro rey" de la comida mejicana en León (para otros leo-tex-mex).
La comida es buena y, aunque no es que la variedad insulte a la imaginación, nada impide disfrutar de sus sabores exóticos regados con la cervecilla de turno (tampoco es que haya muchas donde elegir) salvo dos detallitos.
Uno es que si comes dentro has de aguantar la chapa de música que sí, que está muy bien, que si garage, psychobilly, metal, punk, batidos con todos los estilos, que si ahí lo de la canción del verano no se tolera, que si esa gentuza de Operación Triunfo no suena ni a que haya existido, pero... vaya chapa es comer en un garito cervecero con el ambiente cargadísimo y las guitarritas dando la brasa. Ya lo dijo Steve Wonder al hilo de no sé qué: "si bebes, no conduzcas". Bueno, en fin, para urbanitas recalcitrantes y clientelas varias de psicoanalista reconozco que es lo ideal; eso y los barbitúricos.
Otro es que si comes en las encantadoras 5 mesas de fuera, en un entorno urbano bonito y tranquilo, la camarera no te va a hacer ni puto caso; ni hablemos de sonreír. Eso si no te pasa como a nosotros que no sé si le visitó su tía la del pueblo pero tuvimos que aguantar sus derroches de simpatía en la mesa de al lado donde le llamaban por su nombre. Además se confundió con la bebida y nos trajo un plato de menos que ya habíamos pedido y que, of course, luego tuvimos que esperar durante muuuuucho tiempo. ¿Hace falta decir que ni siquiera practicó la típica, educada e hipócrita tímida disculpa?. Cosas de adolescentes con resaca, supongo.
Aunque típico, el "Zombiezumo" es una bazofia verde y dulcérrima cargada de grados y las "pesadillas" más escasas que el vocabulario de "Poti-poti". Lo demás está bueno y, sin ser barato, está bastante bien de precio. Obviamente el sitio es para lo que es; es curioso y divertido y todo está bastante bueno, así que ¿qué más se puede pedir?
Si tienes más de 30 años, estás del orden de 10 kg por debajo de tu peso ideal, vistes muy pijo aunque a la gente le parece que has sacado la ropa del contenedor de Pancho (el de verano azul) y te gusta la música rock más que una caca a una mosca con irisaciones verdeazuladas no puedes faltar, que el Gran Hermano te vigila...
ENTORNO: 7
SERVICIO: 1
GASTRONOMÍA: 6
PRECIO: 7.5
CALIDAD/PRECIO: 7
Con un aire negruzco y la película de "Freaks" por bandera (y por mantelería) este sitio es el "antro rey" de la comida mejicana en León (para otros leo-tex-mex).
La comida es buena y, aunque no es que la variedad insulte a la imaginación, nada impide disfrutar de sus sabores exóticos regados con la cervecilla de turno (tampoco es que haya muchas donde elegir) salvo dos detallitos.
Uno es que si comes dentro has de aguantar la chapa de música que sí, que está muy bien, que si garage, psychobilly, metal, punk, batidos con todos los estilos, que si ahí lo de la canción del verano no se tolera, que si esa gentuza de Operación Triunfo no suena ni a que haya existido, pero... vaya chapa es comer en un garito cervecero con el ambiente cargadísimo y las guitarritas dando la brasa. Ya lo dijo Steve Wonder al hilo de no sé qué: "si bebes, no conduzcas". Bueno, en fin, para urbanitas recalcitrantes y clientelas varias de psicoanalista reconozco que es lo ideal; eso y los barbitúricos.
Otro es que si comes en las encantadoras 5 mesas de fuera, en un entorno urbano bonito y tranquilo, la camarera no te va a hacer ni puto caso; ni hablemos de sonreír. Eso si no te pasa como a nosotros que no sé si le visitó su tía la del pueblo pero tuvimos que aguantar sus derroches de simpatía en la mesa de al lado donde le llamaban por su nombre. Además se confundió con la bebida y nos trajo un plato de menos que ya habíamos pedido y que, of course, luego tuvimos que esperar durante muuuuucho tiempo. ¿Hace falta decir que ni siquiera practicó la típica, educada e hipócrita tímida disculpa?. Cosas de adolescentes con resaca, supongo.
Aunque típico, el "Zombiezumo" es una bazofia verde y dulcérrima cargada de grados y las "pesadillas" más escasas que el vocabulario de "Poti-poti". Lo demás está bueno y, sin ser barato, está bastante bien de precio. Obviamente el sitio es para lo que es; es curioso y divertido y todo está bastante bueno, así que ¿qué más se puede pedir?
Si tienes más de 30 años, estás del orden de 10 kg por debajo de tu peso ideal, vistes muy pijo aunque a la gente le parece que has sacado la ropa del contenedor de Pancho (el de verano azul) y te gusta la música rock más que una caca a una mosca con irisaciones verdeazuladas no puedes faltar, que el Gran Hermano te vigila...
ENTORNO: 7
SERVICIO: 1
GASTRONOMÍA: 6
PRECIO: 7.5
CALIDAD/PRECIO: 7
Comentarios
Y sobre las aguas de todo tipo que he bebido, bebo y beberé mejor no te cuento que a lo mejor te asustas y empiezas a plantearte que no has disfrutado tanto como creías de la vida con la edad que tienes. De modo que buen rolliiiito, colegui, que en la variedad está el gusto.
Un saludo.
Tengo la misma opinión del Zombiezumo, no entiendo por qué gusta.
Recomiendo: las pesadillas para compartir y el burrito de pollo.
Saludos!